"La palabra, una vez escrita, vuela y no torna" - Quinto Horacio Flaco

jueves, 2 de octubre de 2008

Sólo valen las palabras. El resto es charlatanería...


Mi primera entrada. Al fin, mi primera entrada. Y estoy nervioso, como en una de esas primeras citas. Me gusta pensar, de hecho, en este blog como en una cita: con su mirada retadora y perdida, con su historia en blanco, con sus promesas... Pero, ¿cómo debo comenzar? He estado posándome de blog en blog en busca de buenas ideas, y he advertido que la mayor parte de ellos inicia con una breve descripción del contenido, el autor y hasta del propósito que se persigue (como si recoger menudencias por la red tuviese un propósito). De modo que podría empezar diciendo que éste es un blog literario, de creadores y de creaciones; de letras que se juntaron hasta formular frases y de frases que alguien revolvió hasta crear párrafos. Esto implica, desde luego, algo de historia, psiquiatría y análisis.
Podría empezar diciendo todo eso. Pero a mi blog, en definitiva, no le gusta el establishment (siendo rojo, como es). Me limitaré, por tanto, a dejar que el blog se exprese por sí mismo. Hablar de palabras resulta inútil. Las palabras, en realidad, valen por sí solas. El resto es pura charlatanería (Eugéne Ionesco).
Así que ya basta de palabrerío introductorio y hasta fútil. Vayamos tras las musas de los Grandes --promiscuas, juguetonas e indecentes, como todas las musas--, y tras la estela que la escritura ha venido dejando para nosotros...

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Wow, nervioso? porque?, no entiendo, pero bueno, de blog literario tiene mucho, aqui lo intrigante es, ¿qué blogs raros ha visitado? pues dice que comienzan con una descripicion de tal, ello es raro , pues hasta ahora no he visto alguno asi, jeje, en fin. Pondre algunos vasos contra el cristal de una mesa.

Anónimo dijo...

Si supongo que causa nerviosismo el compartir pensamientos con otras personas, pero para eso es el blog no? jaja esperare a mas publicaciones!

Anónimo dijo...

Me parece interesante el blog, primero en la forma en la que se describe este y en segunda por el tema que es la literatura lo cual es agradable para todo público.

up.francisco.f dijo...

Sin duda alguna creo que será interesante el contenido que tendrá este blog , sólo con leer estas líneas se ve tu gran capacidad como escritor... Espero las próximas entradas y ¡suerte!

Anónimo dijo...

Definitivamente un golpe bajo a la tendencia en blogs.Creo definitivamente que el silencio vale mas que el tratar de describir el pensar ajeno..Felicidades por un nervisosmo aventurero y compartido

Anónimo dijo...

Yo creo que la sencilles es lo que solo habla de las cosas, en efecto, te felicito que asi empieces tu (por cierto disculpa la falta de acentos pero esta fallando mi teclado) te deseo mucha suerte amigo y espero excelentes publicaciones, se que asi sera. Exito!!

Anónimo dijo...

De verdad me divierten los comentarios, o más bien el contenido de, que se han publicado. Básicamente se limitan a decir: ¡Bien un blog, no sé que poner así que le desearé suerte al blogger!

Mi estimado Cuéllar, estás loco, todos los filósofos lo están un poco, y muy a mi parecer, su locura es proporcional a su capacidad creativa y analítica para con las cotidianidades y existencialidades que los demás mortales, y filósofos frustrados como yo, no podemos, o tal vez tememos, contemplar, criticar, analisar, poetizar, humanizar...filosófar, tú ponle el nombre.

"La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda y cómo la recuerda para contarla" Gabriel García Márquez, mi dios pagano, talvez el primero que tuve en realidad, y quien me ha dado esta personalidad romántica y llena de cursilería, creo yo que tiene razón.

NO abriré un blog, la verdad eso de moderar y administrar este tipo de medios me inspira tedio, pero por nuestra amistad y el valor de tu intelecto, que tengo en gran estima, procuraré visitar el tuyo frecuentemente.

[NsR] djAR

J. M. Cuéllar dijo...

La apertura de este blog, djAR, es causa de una orden directa del profesor de Tecnología... No me quejo. En lo absoluto.